Una larga historia

En 1401, en presencia del rey Martín el Humano, se colocaron las primeras piedras del Hospital de la Santa Creu, que tenía que ser el mayor centro hospitalario de Barcelona. Se creó con la idea de reunir en un solo centro los seis hospitales que en aquella época había en Barcelona. La primera fase de las obras quedó terminada en el año 1414 y el hospital empezó a funcionar mientras se iban ejecutando las siguientes fases.

Un siglo después, el complejo estaba prácticamente terminado. En el siglo XVI se llevaron a cabo algunas intervenciones más, como las dos escaleras monumentales y la puerta de la calle del Hospital, de estilo plateresco, que pasó a ser la entrada principal. También se hizo llegar agua potable canalizada. En el siglo XVII se adosó un nuevo edificio, la Casa de Convalescència (el edificio situado en el extremo norte, que da a la calle del Carme) y, en el siglo siguiente, justo enfrente, se levantó el Col·legi de Cirurgia

Del rey Martín al arquitecto Gaudí

A finales del siglo XIX, el complejo ya no podía dar asistencia a una Barcelona cada vez más poblada ni se podía adaptar a las dinámicas de la medicina moderna. Por estos motivos, se acordó trasladarlo al nuevo Hospital de Sant Pau, acabado de construir. Después de cinco siglos en funcionamiento el hospital cerró las puertas en 1926, justo el mismo año en que Antoni Gaudí entró gravemente herido y murió. Fue uno de sus últimos pacientes.

Hoy en día, el antiguo Hospital de la Santa Creu se considera uno de los conjuntos patrimoniales más importantes del gótico civil catalán, y los diferentes pabellones continúan al servicio de la ciudad: allí se han ubicado la Biblioteca de Cataluña, el Instituto de Estudios Catalanes, la Real Academia de Farmacia y la Academia de Medicina, donde se encuentra el anfiteatro anatómico, una mesa de disección visitable que data del siglo XVIII. El espacio también contiene un centro de enseñanza, una sala de teatro, un espacio de arte contemporáneo y, en medio del patio, se erige una fuente con un manantial donde el día del Corpus se celebra la fiesta del L’ou com balla.