Baños y clubes de natación

Bañarse en mar abierto representaba toda una aventura para los barceloneses de hace un siglo, y no siempre estuvo bien visto. Por este motivo, la gente de clase acomodada a menudo optaba por pasar el día en los baños o en los clubes deportivos que proliferaban en aquella época.

Hoy desaparecidos, los baños eran recintos con piscinas y soláriums, de carácter privado y reservados para las familias acomodadas. En las playas de Sant Sebastià y de la Barceloneta fueron muy populares los baños de la Senyora Tona, los de Sant Sebastià, los Orientals, los de Neptú… Todos ofrecían la oportunidad de disfrutar del agua del modo adecuado, ya que en aquella época las convenciones sociales con respecto a bañarse en público eran bastante restrictivas. No obstante, fue en la playa de Sant Sebastià donde se abrió por primera vez una zona de baño mixta en la que podían disfrutar del baño hombres y mujeres juntos.

En la playa de Sant Sebastià también se fundaron los dos clubes de natación más importantes de la ciudad, que hoy día continúan en activo, pero fusionados en uno solo: el Club Natació Atlètic-Barceloneta es un espacio pionero en la práctica de los deportes acuáticos desde hace un siglo.

Playas del siglo XXI

Con motivo de los Juegos Olímpicos de 1992, las playas se sanearon y modernizaron: Barcelona ganaba kilómetros de playa y recuperaba un gran espacio público y accesible para todos.

La playa de Sant Sebastià está bien comunicada por metro, autobuses y el servicio de Bicing. Dispone de un equipamiento completo para disfrutar del mar sin riesgos, con servicio para personas con movilidad reducida o discapacidades, como duchas, lavabos y accesos adaptados, señalización táctil, etcétera.