El jardín urbano

El parque del mirador del Poble-sec, amplio y bien distribuido, se convierte en un jardín urbano que actúa de transición entre el paisaje forestal de Montjuïc y el barrio del Poble-sec. Hay pistas de petanca y juegos infantiles, y espacios de descanso protegidos por la sombra de los árboles y por una pérgola cubierta de trepadoras. En un extremo, un estanque lleno de vegetación acuática recoge el agua que baja por la cascada de dieciocho metros de altura que nace en la pequeña charca que hay montaña arriba. Entre otras especias arbóreas, hay jacarandas, almeces, encinas, acacias, olmos, cipreses y falsos pimenteros. En la gran zona de descanso hay una pérgola cubierta de glicina y parra virgen.

Montjuïc, zona de esparcimiento

Desde finales del siglo XIX hasta la mitad del XX, Montjuïc fue un lugar de esparcimiento para los barceloneses, que subían a la montaña a hacer costillas a la parrilla o a refrescarse. Con la excepción del castillo militar, el territorio era privado y estaba dividido en tres grandes fincas dedicadas a la caza o a la agricultura. Con motivo de la Exposición Internacional de Barcelona de 1929, el Ayuntamiento empezó a comprar terrenos en Montjuïc y ajardinar la montaña.