Josep Manyanet, fundador de la Congregación de los Hijos de la Sagrada Familia, fundó la Escuela Jesús, Maria i Josep en 1877. La primera ubicación de la escuela fue en la calle de la Tramuntana (actual calle Gran de Sant Andreu), en el edificio de la Casa del Salí. Al año siguiente, la escuela se trasladó a la masía de Can Llobet, en la calle de Sant Sebastià. La escuela y la capilla se incendiaron durante los hechos de la Semana Trágica de 1909. Entre 1923 y 1926, el arquitecto Joaquim Vilaseca i Ribera (1885-1963) reformó la escuela y la capilla originales. Durante la República, por miedo a la confiscación de la escuela por parte del Gobierno, que había decretado la supresión de las escuelas religiosas en 1932, los religiosos crearon la Mutua de Padres de Familia. Con el estallido de la Guerra Civil, los edificios de la escuela se utilizaron como hospital de sangre y el templo sufrió nuevos estragos. En el año 1964, la capilla de la escuela se convirtió en la parroquia de Jesús, Maria i Josep, por disposición del obispo Modrego. En el 2004, Josep Manyanet fue canonizado en Roma; entonces, se remodeló la iglesia y se construyó una capilla en memoria de los veinte mártires de la congregación, beatificados en el 2013. El templo se convirtió en santuario cuando se trasladaron los restos del santo, muerto en 1901 y enterrado en el altar mayor. El escultor Francesc Carulla i Serra (1927) realizó un retablo, con altorrelieve, en travertino. El Memorial Manyanet, inaugurado en el 2008, reúne objetos, fotos y publicaciones que recuerdan la vida y la obra del santo y su proyección en el mundo.